El
microrrelato ha existido a lo largo del tiempo como las fábulas y los
proverbios; incluso en las parábolas de Jesús
está presente. Hay grandes
representantes como Julio Cortázar con el libro de cuentos cortos titulado Historias de cronopios y de famas, que
pueden disfrutar en este link:
Compartimos con ustedes un microrrelato
llamado Tiempo muerto.
El
zorro le dijo al conejo:
“Hola, Conejito, ¿me puedes decir
qué hora es?”
Inmediatamente, el amable conejo responde:
“Claro, Sr. Zorro, con
mucho gu…”
Y
en cuanto el Conejo volteó la mirada hacia su reloj, el Zorro lo devoró entero,
hasta el último pelito, de un solo bocado.
Feliz
con tremendo festín, el Zorro caminó a su casa. Antes de dormir, mientras se
sobaba el estómago, notó un ruido raro que salía de él: tic, tac, tic, tac. Finalmente se quedó dormido entre ruidos y tic tacs. Despertó sin vida.
Reporte
médico: indigestión por querer comerse el tiempo muerto.
Queremos pensar que hay
varias moralejas:
- Si eres un conejo, no uses reloj.
- Si tienes hambre, no salgas al bosque de noche. No vaya a ser que te encuentres a un amigo y te lo comas.
- Ser amable no siempre tiene sus recompensas.
Texto: Mónica Badillo